La Gestal-terapia es una de las bases teóricas de Soma, responsable por el desarrollo de la metodología y del proceso práctico de la terapia. La sicología gestáltica, surgida al final del siglo XIX, se tornó una de las primeras y más importantes investigaciones para el desarrollo de la sicología contemporánea. Tuvo su base en los estudios sobre el proceso perceptivo. En la década de 1950, un sicoanalista que divergió de las teorías de Freud, Frederick S. Perls y algunos colaboradores, lanzaron las bases científicas de la Gestalt-terapia, como un método, defendiendo la importancia básica de vivirse de modo perceptivamente alerta al momento presente.
Segundo Perls, cada momento del acto de vivir es compuesto por situaciones más o menos prioritarias, determinadas por lo que llamó de auto-regulación organística. Una persona que no respeta su auto-regulación y pasa a adoptar referencias externas crea lo que él denominó de heterorregulación. Es una valoración excesiva de lo que no es suyo, de lo que viene de fuera y de la opinión de los otros. La heterorregulación corresponde justamente a los personajes sociales que son creados a lo largo de nuestra formación y denunciados en la obra de Wilhelm Reich, producindo un desperdicio enorme de energía vital.
El concepto básico de la teoría de Perls es la idea de no mantener gestalts abiertas, o sea, todas las situaciones de la vida, desde las más simples hasta las más complejas, necesitan de respuestas creativas para ser resueltas. Para entenderse lo que es una gestalt, veamos un ejemplo simple: cuando miramos a un paisaje como el mar y pasa una gaviota, se forma una situación gestáltica. La gaviota representa la figura de la gestalt, lo que está en primer plano de la observación; el mar, las nubes y el cielo corresponden al fundo, que representan algo secundario en el momento. Cuando la gaviota desaparece del campo de visión, se cierra entonces aquella gestalt. La organización del funcionamiento organísmico es lo de figura y fundo. Una figura es cualquier proceso que emerge de un fundo. En términos de percepción, es aquello que ocupa el centro de la atención y en términos de acción, es la principal actividad del organismo.
Otro ejemplo de la relación figura/fundo presente en la gestalt ocurre cuando leemos un libro. La lectura es la figura que se destaca de otras actividades, como torcer el pelo, morder el lápiz, oír el murmullo de voces en la sala próxima o percibir la propia respiración. La figura tiene un límite definido, o contorno, que la encierra o la separa de lo que la rodea. El fundo es contínuo, circunda la figura y se extiende atrás de ella.
Frederick Perls observó que las diversas situaciones de la vida se organizan de forma gestáltica, determinando lo que es más o menos prioritario a cada momento, lo que es figura y lo que es fundo. Sin embargo, cuando se mantiene una gestalt abierta por mucho tiempo, o cuando hay una gran cantidad de esas situaciones, se instala una problemática neurótica. El consumo excesivo de energia decorre de la manutención de esas situaciones abiertas o inacabadas, llevando también a un alejamiento del momento presente, gastándose enegía vital con el pasado inacabado o con la difícil e incierta programación del futuro. De ahí surge la importancia de la valoración del aquí y del ahora como forma de mantener actualizadas las gestalts y, consecuentemente, de no perderse el auto-contacto permanente. Situaciones corrientes se multiplican y actúan en áreas más complejas de la vida, como los campos de la existencia humana, las gestalts van surgiendo, generando conflictos caso no sean solucionados debidamente.
En Soma, los miembros del grupo son llevados a identificar esas situaciones de vida que están conflictivas y consumiendo su energía vital; son llevadas también a descubiertas de estrategias eficientes que las lleven al adecuado encaminamiento y solución de tales conflictos. Eso nos da una acción práctica y eficiente del proceso terapéutico, auxiliando tanto a metodología de Soma, como el desarrollo de la autonomía y de la creatividad volcada al acto de vivir de sus miembros. La utilización de la gestalt en Soma nos ofrece, de esa forma, una poderosa herramienta para la organización vital de los participantes de la terapia.